20 minutos traslado en auto – 30 minutos de caminata – 1 hora de cabalgata
El desayuno estará dispuesto a las 5:30 horas, algunos mates para despertar y luego un buen café, pan amasado, mermeladas caseras, queso y huevos de campo nos darán las fortalezas para este día. Terminado el desayuno nos desplazaremos en vehículos 4×4 a través de los caminos interiores del predio, mientras el sol de la mañana nos regala sus primeros destellos. Llegaremos al lugar denominado “Las Condoreras” distante 17 kms. del punto de partida, nos bajaremos de los vehículos y caminaremos sigilosamente un pequeño trayecto, para pronto observar desde las alturas del gran acantilado al rey de las aves en su hábitat natural. En este hermoso paisaje del amanecer, con el valle de la luna como telón de fondo, podremos contemplar y fotografiar desde distancias increíblemente cercanas, los cóndores en su lento despertar y nos deleitaremos cuando desplieguen sus grandes alas y se lancen al vacío para surcar el cielo. Esta escasa posibilidad que nos brinda la naturaleza quedará por siempre grabada en la retina de quienes tengan la posibilidad de disfrutarla. De regreso a las 10:30 hrs. y mientras en el quincho se prepara un asado parado de cordero, al más puro estilo patagón, te mostraremos en que consiste uno de los juegos típicos de nuestro país. Después de reposar el almuerzo haremos una cabalgata corta por las inmediaciones del predio. Luego de probar los pingos y estando todo listo, nos dirigiremos a la Laguna de los Cisnes para observar la gran variedad de aves silvestres que la habitan. En ellas descubrirás especies tan hermosas como los cisnes de cuello negro, cisnes coscoroba, caiquenes, avutardas y una gran diversidad de patos, taguas y otras especies, destacándose entre ellas el flamenco austral. El regreso a Coyhaique está programado para las 18:30 horas.